Sofío Ramírez, el hijo pródigo

TRASFONDO

Julio Zenón Flores

El senador Sofío Ramírez, esperaba una mejor reacción en las filas del PRI, cuando anunció por segunda vez, que dejaba las filas del perredismo y con ello dejaba entrever que se alejaba de su mentor y jefe político el ex gobernador Ángel Aguirre, quien no ha dejado de estar bajo la lupa del gobierno federal, después del trágico desenlace en Iguala donde quedaron desaparecidos 43 jóvenes estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa y las consecuentes detenciones que sacaron a la luz la existencia de poderosos grupos del crimen organizado y algunos de cuyos integrantes han  señalado con insistencia que el mandatario recibió dinero en su campaña por la gubernatura y lo siguió recibiendo durante su mandato.
Hay que recordar que Sofío Ramírez fue de los colaboradores cercanos al ex mandatario, el más leal (Solo superado, quizás, por la actual diputada local Silvia Romero, que curiosamente recibió el apoyo de sus compañeros perredistas y del propio PRI para hacerse de la comisión de la Contraloría y Cuenta Pública, es decir, en donde se tendrá que emitir el dictamen sobre si se aprueba o no la cuenta del ejercicio del gobierno de Ángel Aguirre) al grado de amenazar desde los tiempos turbulentos de la solicitud de licencia de Aguirre, con salirse del partido del sol azteca si ese organismo no apoyaba al gobernador en problemas.
Pues bien, no hace mucho, volvió a anunciar su salida del PRD, pero desde el PRI no se escucharon las fanfarrias ni los pitos ni los espantasuegras y por el contrario, los tricolores se quedaron esperando, con cierta resignación, que no decidiera regresar al tricolor, porque su partida había hecho mucho daño en su momento, cuando junto con Aguirre dieron el triunfo a su opositor el partido del sol azteca.
Al final de cuentas no llegó al partido de Manlio Fabio Beltrones y se quedó en una especie de limbo, sin declararse tampoco independiente, como esperando a ser llamado por sus ex compañeros.
Por eso había curiosidad de cómo lo recibirían en Guerrero, cuando participara en alguna ceremonia oficial del ahora gobierno estatal pintado de tricolor.
En ese sentido es ilustrativo lo que escribió el colega periodista Carlos Yañez, en su columna “Ladridos políticos”, quien estuvo en el evento y lo describió así en la visita del presidente de la república al puerto de Acapulco el pasado martes 12 enero: “Causó asombro, y provocó el susurro de los priístas. La presencia del senador Sofío Ramírez, quien como la caca del perico… pasó desapercibido… Lo que se escuchó… “Mira el cínico senador, ya quiere volver al PRI”… Su tata Layo, lo abandonó, y ahora se le pega a René Juárez, para que lo cobije, después de que lo criticó y echo mierda”…imagínese usted lector los demás comentarios.
Garrar… Sofío Ramírez, nefasto senador “perredista” quién en noviembre del año pasado renunciara a las filas del Partido de la Revolución Democrática para rebuscar re afiliarse al Partido Revolucionario Institucional, ahora mal aconsejado por sus majunches asesores, pretende ser el candidato a diputado local por el partido tricolor.
Grrrrr… Primero sí, ahora ya no es amarillo este aprendiz de politiquillo, quién en su afán de continuar escalando peldaños dentro de la política regional de la región Montaña Roja de Guerrero, busca ser diputado local por este distrito abanderado por el PRI.
Grrrrr… Sofio Ramírez, sufre del mal de ladrillo en grado alto, pues las neuronas aparte de trabajarle mal, ahora lo hacen tener sueños en tricolor, ya que en amarillo logró llegar al senado por las negociaciones de su tata Layo.
Grrrrr… Sus conciudadanos le exigen deje de promover su imagen con recursos pertenecientes al erario del senado, además de querer darse baños de pueblo visitando comunidades de su municipio que en los años de senador no se había dignado visitar, a los pobladores les llevó despensas que le fueron entregadas por gente de su confianza, por lo que podría estar incurriendo en otro delito.
Grrrrr… Sofío Ramírez, es catalogado dentro de la política regional como un vil traidor de sus principios morales y políticos, ya que se valió del PRD para llegar a la senaduría, para posteriormente unirse a las filas del PRI por intereses económicos y ahora, quiere regresar erigirse como el hijo pródigo de las filas priístas como si no hubiera pasado nada.
Grrrrr… Sus amigos cercanos le han dado la espalda, gracias a su carácter, pues es altivo, prepotente, soberbio, mal educado, pero sobre todo un verdadero MAJUNCHE.
Grrrrr… Lo cierto es que dentro del Partido Revolucionario Institucional, Sofío Ramírez, no tiene la mínima oportunidad de llegar a ser siquiera el candidato suplente, delira si cree que va a encontrar eco dentro de las filas priístas, quienes lo tachan de orate y arribista, que se ponga a trabajar por su pueblo que para eso le fue conferido el cargo de senador.
Grrrrr… Ahhhh y que de paso se consiga otros asesores que lo aconsejen bien, no una bola de mamarrachos que lo único que hacen es endulzarle el oído para beneficiarse ellos de los dineros públicos del senado.

Pues ahí, está. Los políticos creen que los militantes y los periodistas no tienen memoria, pero sí, y ahora paga los platos rotos de su actuar incorrecto.

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