Ante las "limitaciones" de la Policía del Estado para brindar seguridad en los municipios, las fuerzas federales iniciaron su regreso paulatino a las zonas de conflicto en Guerrero, dijo el gobernador Héctor Astudillo Flores, quien se comprometió ante unos 60 alcaldes de la entidad a que no quedará impune el asesinato del alcalde perredista de Pungarabato, Ambrosio Soto Duarte, asesinado en territorio michoacano el sábado 23 de este mes.
Este viernes Astudillo Flores convocó a los 81 presidentes municipales a una reunión en Casa Guerrero, a la que asistieron sólo 60 ediles y el resto se excusaron por no asistir al encuentro, en donde estuvieron además el secretario de general de Gobierno, Florencio Salazar Adame; de Seguridad Pública, Pedro Almazán Cervantes, y de Finanzas, Héctor Apreza Patrón.
Al finalizar el encuentro que fue a puerta cerrada, el gobernador ofreció declaraciones sobre este encuentro y dijo que lo convocó a raíz del asesinato del alcalde perredista de Pungarabato, Ambrosio Soto Duarte, hecho que calificó como un "lamentable y reprobable acontecimiento".
Astudillo Flores precisó que acordaron con los alcaldes "trazarnos una ruta a través de la cual este tipo de hechos tratemos de evitarlos".
Y consideró que los hechos de violencia "no solamente son contra los presidentes municipales y las presidentas, quienes viven este problema de la inseguridad, de la delincuencia, sino es la sociedad en su conjunto; es un asunto que aquí se ha abordado y se ha abordado con toda responsabilidad".
Explicó que sostuvo una reunión con los mandos regionales federales en materia de seguridad, luego de una reunión en la Secretaría de Gobernación (Segob) el miércoles, "después me reuní con Enrique Galindo (comisionado general de la Policía Federal), y fue muy claro en manifestar la disposición y todo el apoyo para Guerrero".
Adelantó que a partir de la próxima semana habrá reuniones regionales con los alcaldes, "este es el tema recurrente, no es la primera vez que se aborda en una reunión con los presidentes municipales, es un tema que se ha abordado con los alcaldes en diversas reuniones que se han hecho fundamentalmente en materia de seguridad; las reuniones regionales espero que las podamos hacer la próxima semana y creo que, como se ha dicho, todas las diferencias deben servir para que podamos hacer mejor las cosas".
En ese sentido, el gobernador hizo un resumen de la reunión donde participaron más de 60 presidentes municipales, "otros mandaron un recado excusándose, participaron 20 presidentes dando sus opiniones, y bueno, espero que esta reunión sirva mucho para que las cosas salgan bien".
Astudillo informó que le dijo a los alcaldes: "hemos dado cuenta de cuáles son las limitaciones del Gobierno del Estado, sin que esto sea cero; pero tenemos una Policía del Estado que no tiene la suficiente fuerza como para enfrentar el grave problema que estamos enfrentando".
Por ello, para atender el problema se va a pedir la participación de la Policía Federal "que ha regresado a Guerrero de manera importante, seguramente seguirán regresando y en conjunto con la Policía Estatal y la secretaría de la Defensa Nacional se tiene que enfrentar nuevamente este problema que no solamente viven los presidentes municipales, sino la sociedad en su conjunto".
El gobernador tampoco quiso decir cuántos alcaldes han recibido amenazas, "no es un tema que quisiera abordar", lo que se abordó fueron particularidades en los municipios y de estrategias para fortalecer la seguridad pública. (www.agenciairza.com)
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