Roberto Camps
Conducir hacia la normalidad los asuntos políticos y administrativos del Congreso de Guerrero, restablecer la relación con el Poder Ejecutivo y dar cauce a los asuntos pendientes de los órganos autónomos y otras instituciones como la Fiscalía General del Estado, son parte de la carga que lleva sobre sus hombros la diputada Yoloczin Domínguez Serna.
Para dar cauce a estos y otros temas sin resolver (concluir el proceso de los cuatro nuevos municipios, por ejemplo), la legisladora morenista ha convocado a los líderes de los diferentes grupos parlamentarios y representaciones de partidos, con quienes ha establecido una relación de comunicación y respeto que le permiten tomar acuerdos.
Y es que al Congreso, como lo ha dicho la diputada Alicia Zamora Villalba, se llega a hacer política, política, no grilla agregaría el que esto escribe.
Cuando se pone por delante el interés de la gente, es posible ver cómo las y los diputados de Morena y demás partidos, votaron a favor de un punto de acuerdo presentado por el partido de la Revolución Democrática.
Hacer a un lado los protagonismos no ha de ser fácil, y para lograr acuerdos se necesita hilar fino, como lo ha hecho hasta ahora la líder del Congreso.
Yoloczin sabe escuchar y se rodea de gente con perfil y experiencia que le asesora, la presidenta de la Jucopo sabe corregir (porque no está exenta de cometer errores), requisito indispensable de quien debe tomar las decisiones correctas.
En las semanas y meses, las y los diputados deberán dar cauce a una pesada agenda legislativa, casi toda integrada por asuntos sin resolver.
Yoloczin tendrá que dialogar con la CRAC, Tlachinollan y otras organizaciones no gubernamentales, y mantener la relación de coordinación con las y los funcionarios del gobierno de Guerrero.
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