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CON ALITO GANA EL PRI

Por Julio Zenón Flores Salgado

La reelección de Alejandro Moreno Cárdenas al frente del Comité Directivo Nacional del PRI y la subsecuente designación de Rubén Moreira y Manuel Añorve en las coordinaciones de los grupos parlamentarios de ese partido en la Cámara de Diputados Federales y del Senado, significan en realidad la salvación del PRI en su etapa actual. Es el triunfo del tricolor ante la andanada de ataques provenientes de la ultraderecha y de ciertos sectores gubernamentales, que piensan con el hígado y solo actúan en función de sus pequeñas venganzas personales.

¿Por qué decimos que es un triunfo del PRI?

El Partido Revolucionario Institucional (PRI) está atravesando una de las peores crisis de su historia:

  1. Pérdida de Poder Político: El PRI ha visto una disminución significativa en su influencia política. En las elecciones generales de 2024, quedó como la tercera fuerza política, detrás de Morena y el PAN1. Actualmente, solo gobierna en dos de los 32 estados de México: Coahuila y Durango1.
  2. División Interna: El partido está profundamente dividido. Muchos líderes y militantes han abandonado el PRI, buscando nuevas alternativas políticas2. Esta desbandada ha debilitado aún más al partido.
  3. Alianzas Necesarias: Para mantener su relevancia, el PRI ha tenido que formar alianzas con otros partidos, como el PAN y el PRD3. Sin embargo, estas alianzas no siempre han sido exitosas y han generado tensiones internas.
  4. Crisis de Liderazgo: La gestión de Alejandro Moreno ha sido muy criticada. Su estilo de liderazgo y las decisiones unilaterales han generado descontento y han contribuido a la crisis actual2.
  5. Desafíos Electorales: En las últimas elecciones, el PRI ha sufrido importantes derrotas, perdiendo bastiones históricos y viendo una disminución en su base de votantes1.

En estricto sentido, la crisis del PRI no ha sido motivada por el estilo de dirigir el partido, atribuido a Alejandro Moreno, alias “Alito”, sino por el nuevo contexto político generado por el exitoso posicionamiento de Morena.

Morena se ha convertido en una fuerza atractiva tanto para la izquierda como para el priismo original, que planteaba un desarrollo económico nacionalista y una operación política plural, integradora de las demandas sociales más antiguas. A tal grado que Morena se convirtió en una fusión de las banderas del PRI y del PRD, provocando una migración de militantes de base de esos partidos hacia allá y acuerdos cupulares secretos y no tanto, en las altas esferas, como gobernadores, senadores y demás.

Morena generó una abierta desbandada en el PRI y en el PRD, pero los más maliciosos prefirieron mantenerse en el PRI y el PRD y desde ahí operar a favor de Morena, para irlo desgastando hasta hacerlo desaparecer.

Por eso, en el PRI, “Alito” ha generado una sacudida, para que quienes estén vacilando y aquellos que cargan acusaciones de la DEA, que son un lastre para el partido, se definan y se disciplinen, y dejen de trabajar para el otro partido o que se queden fuera.

LA JUGADA ES AUDAZ, pero es correcta, pues es la única manera de salvar al PRI y de mantenerlo como un partido sólido y unificado, que pueda tomar acuerdos reales internos y manejar su política de alianzas sin infiltrados que se venden por separado.

Como queda, el tricolor puede asumir alianzas hasta con facciones de Morena, de eso no hay duda, pero tampoco hay nada malo en ello, pues significa que es la facción que entiende que tiene que recuperar sus banderas que le arrebató el partido guinda y eso le devolverá la militancia que perdió.

1)     Elpais 2) Elmanana 3)Quadratin.mexico



xxx Editado por JULIO ZENÓN FLORES SALGADO.- Comunicólogo, especializado en periodismo político www.facebook.com/trasfondoinformativo, Youtube@JulioZenonFlores, Twitter@trasfondoin, e mal: zenon71@hotmail, Whatsapp 7441054888

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