Chilpancingo, Guerrero, 6 de octubre de 2024.- Tras el asesinato de Alejandro Arcos Catalán, alcalde de Chilpancingo, su suplente, Gustavo Alarcón Herrera, está listo para asumir la presidencia municipal de manera interina. Arcos, quien había tomado posesión del cargo el 30 de septiembre, fue hallado decapitado en una camioneta en la colonia Villas del Roble, un suceso que ha conmocionado a la capital del estado.
Gustavo Alarcón, médico cirujano con experiencia política, había sido candidato a la alcaldía en 2021 y fue registrado por el PRI como suplente de Arcos. Según la Ley de Instituciones y Procedimientos Electorales del Estado de Guerrero, las vacantes en cargos locales deben ser cubiertas por los suplentes respectivos, y el Congreso del Estado deberá ratificar su entrada en funciones. En caso de que el suplente no acepte el cargo, el Congreso elegirá al nuevo alcalde de entre una terna surgida de cualquier vecino de la ciudad de Chilpancingo.
Cabe recordar que el suplente del alcalde asesinado previamente, siendo parte del PAN, compitió contra el propio Alejandro Arcos y contra Norma Otilia Hernández, siendo ésta quien ganó esa elección; asimismo cabe recordar que antes fue parte del PES, desde donde compitió por la candidatura a la alcaldía de Chilpancingo por el partido Morena.
Hasta el momento, Alarcón no ha emitido un pronunciamiento público sobre el homicidio de su antecesor. Sin embargo, su eventual asunción al cargo representa una oportunidad para abordar la crisis de seguridad y gobernabilidad en el municipio. Las expectativas son altas, ya que la comunidad busca un liderazgo firme en medio de un clima de violencia que ha afectado a Guerrero.
El proceso electoral que llevó a Arcos al cargo había sido reñido, y su muerte plantea preocupaciones sobre la seguridad de los funcionarios públicos en la región. La situación exige respuestas efectivas para restaurar la confianza de la ciudadanía en sus líderes locales.
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