En un hecho que resalta tanto la crudeza de la violencia en Acapulco de Juárez como la nobleza de los animales, un hombre fue ejecutado por presuntos sicarios en la colonia Los Lirios.
La víctima, identificada por vecinos como un pepenador conocido por recorrer las calles siempre acompañado de sus perros, fue asesinado frente a la mirada desconsolada de sus fieles compañeros. Según testimonios, los responsables podrían estar vinculados a la colonia La Máquina.
Una imagen que ha conmovido a la comunidad muestra a los perros custodiando el cuerpo de su dueño, un gesto de lealtad que contrasta con la insensibilidad humana frente a la violencia y la muerte. Este caso remite a otro reciente en Chilpancingo, donde varios perros fueron envenenados, evidenciando el desprecio hacia la vida animal por parte de algunos sectores de la sociedad.
Este suceso no solo refleja el grado de inseguridad en la región, sino también una lección implícita: la lealtad y el afecto incondicional que los animales ofrecen, aún en los momentos más oscuros.
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